20 de junio de 2013

El Real Madrid derrota al Barça en el quinto partido y se proclama campeón

El equipo blanco levanta un trofeo que no ganaba desde el año 2007
 Felipe Reyes vuelve a ser decisivo y es elegido el mejor de la final

RTVE



Ficha técnica:

79 - Real Madrid (20+21+14+24): Rudy (15), Carroll (9), Mirotic (6), Llull (4) y Begic (4) -quinteto inicial-, Rodríguez (5), Slaughter (5), Darden (13), Draper (4) y Reyes (14).
71 - Barcelona Regal (18+14+16+23): Marcelinho (2), Navarro, Oleson (4), Lorbek (3) y Tomic (9) -quinteto inicial-, Sada, Mavrokefalidis (3), Wallace, Ingles (25), Rabaseda, Todorovic (2) y Jasikevicius (23).
FELIPE FERNÁNDEZ
FELIPE FERNÁNDEZ 
19.06.2013
El Real Madrid ha conseguido ganar su 31º título deLiga Endesa después de imponerse al FC Barcelona Regal en el quinto y definitivo partido de la final. Era el día de jugarse el todo por el todo y el equipo blanco no ha defraudado a una afición que llenó el Palacio de los Deportes de Madrid y que ya llevaba demasiado tiempo esperanco una alegría de este calibre. [Estadísticas del Real Madrid 79-71 FC Barcelona Regal]


Felipe Reyes, imparable de nuevo frente al Barça, lideró a su equipo y se canjeó el premio al jugador más valioso de la final. 


Como no podía ser de otra forma, antes de que empezara la final, el Palacio de los Deportes guardó un minuto de silencio en memoria del técnico Manel Comas, fallecido el pasado lunes a los 68 años de edad víctima de un cáncer.
Después del homenaje al 'sheriff', empezó el espectáculo propio de un partido en el que no había nada después de él. El que ganara campeón, el que perdiera iría directo al olvido,
Esa importancia del choque hacía que Juan Carlos Navarro no permitiera que una rotura de fibras en un parte médico le dejara fuera. El capitán culé no solo estaba para jugar sino que además los estaba para saltar como titular.
Pascual tenía claro que su jugador franquicia era muy importante para sus compañeros pero también sabía que no estaría en Madrid como de costumbre. De ahí que los primeros ataques culés buscaran siempre a los hombres altos, Tomic y Lorbek, en detrimento de los jugadores exteriores.
Laso por su parte quería contrarrestar siendo fiel a su estilo. Colocó a Carroll en el quinteto de inicio y el americano entró por fin, a base de canastas, en un partido de esta serie. Su acierto unido al de Rudy y Llull colocó el 10-0 en el marcador que obligó a Pascual a pedir tiempo muerto.
El público que llenaba el pabellón estaba enloquecido con su equipo ya que era capaz de anotar 20 puntos en los ocho primeros minutos. Pero enfrente estaba el eterno rival, ese que mejor le conoce. Sin precipitarse, con calma y con una zona, el Barça fue capaz de endosar un parcial de 0-8 en los dos últimos minutos para maquillar el tanteador al término del primer cuarto (20-18).
Esa igualdad continuó en el segundo asalto. La intensidad defensiva y en el rebote fue manifiesta. El empujón del Real Madrid en los últimos compases (parcial de 10-0) fue lo que llevó el partido al descanso con el 41-32 en el electrónico.

El Barça sin Navarro no es el mismo

Tras la reanudación, dos canastas de Rudy al contraataque tras robo pusieron la máxima diferencia del partido. Se complicaba el partido para el FC Barcelona que esta vez no repartía los puntos entre varios jugadores, no dominaba el rebote como en el cuarto y lo más destacado, no tenía al mejor Navarro.
Para colmo de los blaugranas, Rudy metió su primer triple en la final en su vigésimo intento para poner a su equipo 17 arriba.
En ese desquiciamiento (10 pérdidas en 25 minutos) que vivía el Barça emergió la figura de otro veterano, Sarunas Jasikevicius. El lituano mantuvo a su equipo ahí y contagió con su acierto a Joe Ingles, que a la carrera consiguió 10 puntos para meter al Barça en el partido de nuevo antes de afrontar el cuarto y definitivo intervalo (55-48).
El australiano siguió tirando de su equipo pero se encontraba solo a la hora de remar. En cambio en el Madrid aportaban todos, desde Sergio Rodríguez a Slaughter, pasando por un extraordinario Darden.
La intensidad blanca en la defensa del último cuarto decidió finalmente el partido y la final. El Barça no podía aspirar a ganar el choque cometiendo 16 pérdidas en ataque, por muy iluminados que estuvieran Ingles y Jasikevicius.
En los minutos de la verdad, la mano de los jugadores blancos no tembló y el marcador final fue 79-71. El Real Madrid ampliaba su ventaja con el FC Barcelona en títulos ligueros (31 para los blancos por 17 de los azulgranas), Baskonia (tres títulos), Joventut de Badalona (dos) y Manresa y Unicaja de Málaga (ambos con una).

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